La cocaína es una sustancia psicoactiva que se extrae de las hojas de coca, se presenta como un polvo de color blanco, es altamente adictiva y tóxica y es un estimulante que se consume principalmente esnifado.
¿Por qué se empieza a consumir cocaína?
Tratamiento
El consumo de esta sustancia siempre es problemático debido al elevado índice de toxicidad y adicción que supone su uso, además de la elevada comorbilidad con trastornos psicológicos graves entre quienes la utilizan.
Sí. El consumo de cocaína puede conllevar a dependencias caracterizadas por abstinencia, recaídas y desarrollo de tolerancia. Algunos de los síntomas físicos y psicológicos más asociados al consumo de cocaína son: depresión, fatiga, aumento del apetito, insomnio, sueños desagradables, lentitud para pensar y pérdida de la atención.
El término perico es un concepto local de Colombia, que se usa para referirse a la cocaína, sin embargo, hay datos que refieren que el “perico“ tiene menos pureza ya que en algunas ocasiones tiende a rendirse con otras sustancias.
Para los datos publicados las personas que consumen “perico“ se toman como consumo de cocaína ya que sus efectos, razones de uso, consecuencias y señales son las mismas.
La cocaína puede afectar de forma grave la salud de sus consumidores, generando algunos de estos efectos negativos a corto, mediano y largo plazo:
La sobredosis de cocaína puede causar la muerte de la persona
Algunos síntomas físicos y psicológicos de la adicción a la cocaína son:
El 2CB, Tusi o Nexus es una sustancia emergente de carácter alucinógeno y estimulante y es una sustancia diferente a la coca. Según el Sistema de Alertas Tempranas del Ministerio de Justicia de Colombia en el país no se comercializa la sustancia 2CB, sino que su principal componente es ketamina, una sustancia disociativa con efectos alucinógenos. Por eso, la policía en Colombia bautizó a esta última como la cocaína rosada.
Como cualquier dependencia, la adicción a la cocaína puede atacarse con un proceso de desintoxicación llevado por profesionales, que acompañen a la persona a lograr la libertad, la salud mental y el bienestar que merece, para recuperar su entorno familiar y formar hábitos saludables que la alejen del consumo.
Las opciones de tratamiento disponibles para dejar la cocaína dependen del nivel de dosis y consumo.
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